A URBANISMO DE MÁLAGA HAY QUE FUNDIRLO COMO FUNDEN LAS CAMPANAS.
O MEJOR, FUNDARLO DE NUEVO
No se puede hacer más daño a la imagen y la personalidad de una ciudad que el que este departamento municipal ha hecho a la Málaga la Bella, desde que yo tengo memoria, y estoy a punto de mudarme donde las malvas.
Desde Taillefer y la Equitativa, siguiendo por tres o cuatro mamotretos en la Alameda, continuando por otros tantos adefesios inadmisibles en Carretería y otros más en calle Victoria, no hay que ser experto ni haber viajado mucho para darse cuenta del cachondeo y la empanada mental de quienes llevan el día a día de Urbanismo.
Es posible que no haya que cambiar tanto de directivos.
LO QUE HACE FALTA ES UNA DEFINICIÓN CLARA DE LAS FUNCIONES, porque para aprobar una edificación no puede bastar la comprobación volumétrica en relación con las leyes del momento, sino tener claro el modelo de ciudad que se TIENE Y SE QUIERE, porque hay que analizar con mucho cuidado varias cuestiones en cuanto a las edificaciones dentro del casco viejo; ESTILO, ARMONÍA CON CUANTO LAS RODEA, ALINEACIÓN CON LOS DOS EDIFICIOS CONTIGUOS. Si quieren saber más, que me llamen.
El batiburrillo de alturas y estilos injertado en la Alameda, Carreteria y la Victoria es vomitivo y muy atentatorio del prestigio de Málaga.
EN PRAGA, LOS METERÍAN PRESOS.
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